Las habitaciones tienen aire acondicionado para mantenerte fresco durante tu estancia. ¡Genial para el calor! 🌬️

Lo más importante era el personal - son unas personas encantadoras y majísimas. El lugar tenía una ubicación aislada cerca del centro de la ciudad, de las zonas aledañas y también de la playa.

Teníamos una habitación cómoda y buena con una zona de estar, una plancha y tabla de planchar, una chimenea de piedra. El personal maravilloso y amable nos ayudó durante nuestra estancia de 4 noches. Ubicación: el hotel estaba en las proximidades de la naturaleza.

Hotel gestionado por una familia y muy limpio con un personal amigable. Habitación espaciosa y moderna con camas muy cómodas. Ubicado en un vecindario hermoso y aislado, cerca del mercado y de una hermosa playa. El restaurante ofrece deliciosa comida asiática.

Me dieron una habitación impecable, muy espaciosa con buenas camas y aire acondicionado y ducha de agua caliente. La piscina era bien mantenida, el desayuno genial. El personal fue extraordinariamente complaciente y extra agradable, con una actitud muy agradable.

Las habitaciones son muy cómodas y acogedoras. Las camas son grandes y los colchones de primera clase. Me encantó tener control remoto para el aire acondicionado y la ducha con agua caliente/fría. La vista desde la habitación también es impresionante, ya sea al jardín, a la piscina o al mar.

Quizás lo único que me gustó menos fue el minibar, pero eso es solo mi opinión subjetiva. Es posible que otros todavía disfruten de él.

Las instalaciones son bastante modernas y acogedoras, con aire acondicionado y todo lo necesario para estar cómodo. El personal del restaurante es muy amable y la comida tiene buen sabor y precios razonables. Además, la piscina del hotel es maravillosa y ofrece una vista preciosa.

La ubicación no es la mejor, ya que el hotel está lejos de las zonas turísticas y puede ser difícil acceder a él. También, la playa del hotel no es muy agradable, ya que el agua es poco profunda y puede haber fango.

La ubicación era perfecta, a solo unos minutos en moto de la playa de Macatumbalen y del animado centro de la ciudad. ¡Exploramos la ciudad en triciclo y fuimos en paseos en barco desde el muelle a las 9 de la mañana! Además, alquilamos motos para explorar la zona a nuestro propio ritmo. ¡Fue una aventura llena de diversión!

La única cosa que nos habría gustado es que el hotel tuviera una discoteca o algún tipo de entretenimiento nocturno para jóvenes fiesteros como nosotros. ¡Hubiera sido la guinda del pastel para nuestras vacaciones!

El hotel ofrecía habitaciones impecables y muy espaciosas con WiFi gratis. La comida era deliciosa, había una buena elección de opciones. Todo el mundo era acogedor y excelente.

Siempre vuelvo a este hotel en San Vicente porque su personal es amable y servicial. La primera vez que me alojé aquí, me ayudaron a curar una picadura de insecto. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi gratis, estacionamiento, seguridad las 24 horas, piscina, aire acondicionado y mucho más. Volveré este fin de semana.

Lugar inmejorable, instalaciones súper chulas, atención adorables, organización excelente, comida increíble.

Nada de nada.

Todos los empleados eran muy amables y atentos. La habitación era perfecta y relajante, con todas las comodidades necesarias, incluyendo aire acondicionado y una ducha caliente. El desayuno ofrecía una amplia variedad de deliciosa comida a un precio razonable.

Las vistas, el atardecer, la cercanía a la playa con cerditos y la excursión entre islas y Por Barton. Roberto, Thelma y el personal son muy amables y atentos. Buen trato de Telma y las chicas de la cocina. Estancia tranquila y paradisíaca. El hotel está bien conservado y las habitaciones son cómodas.

Me sentí muy bien recibido, no tengo ninguna queja.

Nos encantó nuestro tiempo en este lugar. La ubicación es perfecta, justo en la playa, lo cual nos permitió disfrutar de hermosas vistas y despertarnos con el sonido relajante del mar. Las instalaciones del hotel son muy adecuadas y limpias, lo que nos hizo sentir cómodos durante nuestra estancia. Además, el personal fue increíblemente amable y servicial. Nos brindaron toda la ayuda que necesitábamos y nos hicieron sentir como en casa.

Nada en absoluto de lo que quejarse. Nos sentimos completamente satisfechos con nuestra experiencia en este lugar.

Las instalaciones súper chulas, playa privada, atención increíble, comidas deliciosas. Todo organizado y facilitado por los adorables dueños Roberto y Telma.

Me sentí muy relajado, no me puedo quejar.